El sorgo: ventajas nutricionales atractivas para la alimentación animal

La cosecha europea de 2017, entre las mejores desde hace 10 años para el sorgo en grano, se vio marcada por un fuerte aumento de la producción gracias al incremento de superficies y niveles de rendimiento, superiores a los de 2016. En general, las condiciones climáticas del año permitieron limitar el estrés hídrico durante el periodo sensible, cercano al desarrollo de la espiga. Si se tienen en cuenta las temperaturas acumuladas, la mayoría de las cosechas fueron bastante precoces, desde mediados de septiembre hasta mediados de octubre, con niveles predominantes de humedad inferiores al 20 %, incluso del 15 % en ciertos países (Rumanía, Ucrania y Rusia).
El valor energético del sorgo producido en Europa sigue siendo elevado: 3845 kcal/kg MS (Materia Seca).

Estabilidad en las proteínas y bajada ligera del almidón

El contenido promedio de proteínas es del 10,7 % MS, cercano al valor de 2016 (10,6 % MS). Se asemeja a la media quinquenal (10,7 % MS). Los contenidos de proteínas varían del 10,1 al 12,1 % MS según las muestras. El 35 % de las muestras presentan un índice de proteínas superior al 11,0 % MS.
Con una media del 76,2 % MS, el sorgo confirma su elevado contenido de almidón. Este valor ha disminuido 0,6 puntos con respecto a 2016. Supera en 0,4 puntos la media de los últimos 5 años (75,8 % MS). Los contenidos de almidón varían del 75,0 al 77,0 % MS según las muestras. El 35 % de las muestras presentan un contenido de almidón superior al 76,5 % MS.
El contenido promedio de materia grasa (4,5 % MS) se sitúa cerca del valor de 2016 (+ 0,2 puntos) y supera en 0,4 puntos la media quinquenal (4,1 % MS). Los contenidos varían del 3,9 al 5,2 % MS según las muestras. El 35 % de las muestras tienen un valor superior al 4,5 % MS.

Elevado valor energético.

Con un contenido promedio de 3845 kcal/kg MS, el sorgo de la cosecha de 2017 confirma su elevado valor energético para la alimentación de aves. Dicho valor equivale al de 2016 (+ 14 kcal/kg MS) y supera en 53 kcal/kg MS la media de los últimos 5 años (3792 kcal/kg MS).
Los resultados son homogéneos en las regiones estudiadas.

Los contenidos de materia grasa (4,5 % MS) y los valores reducidos de fibra (índice de paredes insolubles en agua del 8,6 % MS) explican el valor energético algo más elevado del sorgo en grano de este año. Supera en un 3,2 % el del maíz en grano (respectivamente, 3845 frente a 3725 kcal/kg MS de media en el estudio FranceAgriMer/ARVALIS – Instituto del vegetal, 2017).

De esta forma, el contenido de proteínas y el valor energético elevados del sorgo en grano de la cosecha de 2017 y los valores reducidos de taninos en las variedades cultivadas en Europa confieren al sorgo en grano ventajas innegables para utilizarlo en la alimentación animal.
Por tanto, estos resultados muestran que, siempre y cuando las operaciones de recolecta, secado y almacenamiento se realicen correctamente, el sorgo debería encontrar una salida importante en la alimentación animal.

Organización del estudio

El estudio se centra en 10 departamentos franceses que representan alrededor del 85 % de la cosecha nacional de sorgo. Las recogidas de muestras se efectúan en los organismos recolectores de las principales zonas de producción. Las recogidas de grano se efectúan en los silos tras salir de los secaderos, al comienzo del periodo de almacenamiento. Los análisis de composición química (proteínas, almidón y materia grasa) se realizan en las 20 muestras elementales. Las mediciones de paredes insolubles en agua y valor energético en gallos se efectúan en las cuatro «mezclas regionales» que proceden de reagrupar las muestras elementales de cada zona.

Fuente: FranceAgriMer/ARVALIS – Instituto del vegetal/Estudio de calidad de los recolectores, 2017.