Desarrollo del sorgo para biogás en Polonia
Las múltiples oportunidades que ofrece el sorgo, como su producción de biomasa o su resistencia frente al cambio climático, se perciben como ventajas en Polonia. En las instalaciones de biogás, como complemento del maíz, proporciona una diversificación interesante. Por ello, su producción podría crecer significativamente en este país.
Gabriel Gawracki es responsable de explotación en un centro de cultivo situado cerca de Kętrzyn. En el lugar donde trabaja se encuentra una de las 150 instalaciones de biogás que existen en Polonia. Forma parte del extenso conjunto de Brzeźnica, que abarca casi 1200 hectáreas. Gabriel Gawracki se ocupa principalmente de dirigir los cultivos. Para él, el sorgo tiene futuro como insumo en las instalaciones de biogás.
«Para diversificar los cultivos utilizados como insumos en nuestra fábrica de biogás, apostamos por el sorgo durante la última estación tras reflexionar profundamente. Comenzamos con 25 hectáreas, pero aumentaremos la superficie hasta las 70 en la próxima temporada».
«Elegimos una variedad de tipo ensilado con una biomasa relativamente alta, algo importante sobre todo para el uso del biogás. Decidimos que una mezcla con un 70 % de ensilado de maíz y un 30 % de ensilado de sorgo ofrecería las proporciones adecuadas como insumo para la fábrica de biogás. Además, utilizamos residuos procedentes de centrales lecheras y mataderos, así como purines. La energía obtenida se inyecta en la red y el calor se aprovecha en la explotación».
«Una de las principales ventajas de este cultivo es que necesita poca agua. Del 24 de abril al 17 de junio, no cayó ni una sola gota de agua en nuestra región. No nos percatamos de ningún síntoma de sequía, aunque solo cayeron 120 litros de lluvia durante todo el periodo de crecimiento del sorgo. La velocidad de crecimiento también es asombrosa. En el transcurso de dos meses, las plantas pasaron de ser un pequeño grano a tener una altura de 4,5 metros. El sorgo crece ante nuestros ojos y nos ha sorprendido de forma positiva desde la primera estación».